El hummus se trata de uno de los platos más conocidos y típicos de Oriente Medio. Por ello, os enseñamos como preparar esta clásica receta de hummus de garbanzos.
Por su origen de oriente, la palabra hummus en árabe significa garbanzos. Y es que estas legumbres son la base de esta receta.
La verdad, que en la cocina oriental, los garbanzos y las legumbres en general son unos alimentos que se usan mucho. De hecho, anteriormente os enseñamos la receta árabe de falafel de garbanzos, otra opción saludable y original de tomar legumbres, y además está riquísima.
Asimismo, cabe destacar que las recetas con legumbres son muy completas y en el caso de no comer carne y/o pescado, son una gran fuente de proteínas.
Uno de los ingredientes claves para esta clásica receta de hummus de garbanzos es la pasta de tahini, también muy típica y usada en la cocina oriental.
El tahini, no es más que una crema de semillas de sésamo. Este tipo de semillas, al igual que los frutos secos, destacan por su contenido en ácidos grasos, lo cual hace que al triturar las semillas, se suelten las grasas y finalmente quede una textura pastosa apta para untar.
Hoy en día, además del hummus de garbanzos, también encontramos recetas de hummus de vegetales como zanahoria, remolacha, judías, guisantes, etc. Todas estos platos se basan en la receta clásica de hummus de garbanzos, pero además de ser estas legumbres, el ingrediente protagonista, también lo será la verdura que hayamos elegido.
Ingredientes
Tahini
- 200 gr semillas de sésamo
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
Hummus de garbanzo
- 400 gr de garbanzos cocidos
- 2 dientes de ajo
- 3 cucharadas de tahini
- 2 cucharadas de aceite de olvia virgen extra
- 2 cucharaditas de comino
- Sal rosa
- Pimentón dulce
Preparación de la clásica receta de hummus de garbanzos
Lo primero que prepararemos para esta receta es la salsa tahini o pasta de sésamo. También la podemos comprar, pero la verdad que es muy fácil de preparar.
Para realizar el tahini, solo necesitaremos semillas de sésamo, aceite y sal. Las semillas si no son tostadas, las tostaremos unos 5 minutos en la sartén. En cambio, si el sésamo ya lo compramos tostado, solo tendremos que triturarlo con un poco de sal y aceite y listo.
Estas semillas, al igual que los frutos secos (como la crema de avellanas o la crema de cacahuete), son muy ricas en ácidos grasos, con lo cual, a medida que las vamos triturando, irán desprendiéndose de las grasas, formando una pasta cremosa.
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Hummus de garbanzos
Una vez tengamos preparado el tahini, pasaremos a realizar la clásica receta de hummus de garbanzos.
Para ello, tenemos 2 opciones. Usar garbanzos sin cocer o comprar un bote de garbanzos cocidos, y así nos ahorraremos el paso de cocerlos.
Si no usamos el bote, lo primero que haremos, el día anterior, es dejar los garbanzos a remojo toda la noche. Al día siguiente simplemente los coceremos en agua con sal y una hoja de laurel sobre 1 hora y media, hasta que estén tiernos.
Una vez los garbanzos están cocidos pasaremos a preparar el hummus. Para ello, escurrimos bien las legumbres y las mezclamos con los dientes de ajo, el tahini, comino y sal. A medida que trituramos todo con una batidora vamos añadiendo un poco de aceite de oliva, para darle una consistencia más cremosa.
Como este plato lleva ajo en crudo, un truco para que no nos repita esta receta de hummus de garbanzos, es quitarle el germen que tiene en su interior.
Si el hummus de garbanzos nos queda muy espeso, siempre podemos añadir también un poco de agua de la cocción de las legumbres. (Si usamos garbanzos cocidos de bote, agregaremos agua de beber, nunca la del propio bote).
Una vez consigamos las consistencia que nos guste, le podemos agregar un poco de pimentón dulce o la especia que prefiráis, además de un chorrito de aceite de oliva, este paso es al gusto de cada uno.
Así de sencillo podremos disfrutar de una acompañante saludable y cargado de proteínas. Esta receta clásica de hummus de garbanzos no puede faltar entre nuestros platos, además, acompañado de unos palitos de pan como los de almendras o con chips de verduras como zanahorias, está de vicio.
Un ecosaludo!